Efectivamente, la sonrisa les delata... la misma sonrisa en la madre que en el hijo. Ambos, chupando del presuesto público, implementando legislaciones que transfieren ese dinero público hacia las empresas privadas -de su entorno-, acabando con toda iniciativa tendente al bien común, acusando de mamandurrias a los parados... cree el ladrón que todos son de su condición.
Y con su sonrisa campechana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario